Hola, muchas veces he reflexionado sobre el siguiente tema, aunque nunca he escrito sobre ello, es algo que siempre me ha llamado la atención, ver como en las agencias de diseño se prioriza el aspecto racional y lógico, u otros apectos, olvidándonos de donde proviene la idea original e intentar mantener esa idea fresca, como la fruta de km 0.  Llamo trazabilidad en el mundo del diseño gráfico, packaging  y branding,  al hecho de  conseguir mantener la idea, magia e intención original en todas las fases del proyecto hasta que este sale al público, muchas veces esta magia se pierde o se descafeina, llegando a soluciones mediocres. Creamos un packaging que pasa todos los controles de calidad, pero que ha perdido la frescura de la idea original. A veces Las razones para que esto ocurra pueden ser de distinta naturaleza:

Los procesos de diseño a veces adolecen de un exceso de democracia: múltiples opiniones de distintas personas involucradas en el proyecto, y que, intentando contentar a todos, hacen que este vaya perdiendo la frescura y la intención que puede haber tenido en un inicio, evidentemente, la dificultad reside en mantener la idea y cumplir todas las exigencias del briefing, y aquí entra otro motivo que puede hacer que un Pack sea timorato o mediocre: el exceso de celo en el cumplimiento de briefing, evidentemente ha de cumplir briefing, pero sabemos todos, que al igual que en la vida, siempre hemos de elegir, tomar decisiones que implica dejar atrás otras opciones, es una ley de vida que a veces olvidamos que también existe en nuestra profesión.

A veces exigimos a un diseño todo aquellas cosas que nos preocupan y tratamos de esconder esconder todas esas deficiencias de nuestro producto… olvidando varias cosas: la belleza y también la diferenciación, reside en la rareza, no en la estandarización.